I DOMINGO DE CUARESMA (A)

Domingo 26 de febrero de 2023
Mt 4,1-11

«En aquel tiempo, Jesús fue conducido por el Espíritu al desierto, para ser tentado por el diablo. (…) “Si tu eres Hijo de Dios, di que estas piedras se conviertan en panes”. Pero Jesús respondió: “Está escrito: No sólo de pan vive el hombre, sino de toda palabra que sale de la boca de Dios”. (…)
“Si eres Hijo de Dios, tírate abajo; está escrito de hecho: Dará ordenes a sus ángeles que se refieren a ti, y ellos te llevarán en sus manos para que tu pie no tropiece con ninguna piedra”. Jesús le respondió: “Está escrito también: No tentarás al Señor tu Dios”. (…)
“Todas estas cosas te daré si, te postras y me adoras”. Entonces Jesús le respondió: “¡Retírate, Satanás! Está escrito de hecho: Adorarás al Señor, tu Dios: sólo a Él darás culto”».

(Mt 4,1.3b-4.6-7.9-10)

La tradición identifica una montaña que se encuentra detrás de la ciudad de Jericó, como el lugar en el que acontecieron las tentaciones: el Monte de la Cuarentena, así llamado para conmemorar los 40 días. Mateo el evangelista, nos dice el motivo por el que Jesús fue llevado al desierto: paraa ser tentado por el diablo, que inmediatamente llama al “tentador” es decir el “experimentador”. El verbo griego (peiràzo) denota un “poner a la prueba, examinar”; el diablo entonces se presenta a Jesús para ponerlo a la prueba. Algunos estudiosos individuan en los 3 momentos de prueba un exámen a los 3 aspectos del Shemà Israel (Dt 6,4-5), que es la enseñanza central de la Biblia.

En la interpretación rabínica del Shemà Israel encontramos:
“Amarás al Señor tu Dios con todo tu CORAZÓN”; todo, es decir con sus dos impulsos, el bueno y el malo, adheriendo completamente a la Palabra de Dios. Recordemos que Salomón pidió un corazón dócil a la Palabra de Dios (1Re 3,9).
“Amarás al Señor tu Dios con toda tu ALMA”; el alma, la vida, el soplo vital, en la Biblia está considerado como la sangre (Lv 17,14). Entonces, amar a Dios con toda el alma significa amarlo hasta donarle la vida. Jesús no se deja engañar y está completamente dispuesto al martirio.
“Amarás al Señor tu Dios con toda tu FUERZA”, es decir con los bienes materiales (cfr. Mishnà Beraqot 9,5). Jesús renuncia a la riqueza material para depender diaramente del Padre providente.

Las 3 pruebas demostraron que Jesús, el Hijo de Dios, ama al Padre con todo el corazón, con toda el alma, y con todas las fuerzas. ¡Él es así el nuevo Moisés que introducirá al pueblo en la Tierra Prometida!

p. Giuseppe